Lanzarote en 4 días (parte 4 de 4)


Día 1: Viaje en avión y llegada a Playa Honda

Día 2: Mercado de Teguise, Ruta escénica, Yaiza, Salinas y Playa de Janubio, Charco de los Clicos, Hervideros, El Golfo

Día 3: Timanfaya, Mirador del río, Cueva de los verdes, Jameos del Agua y Haría

Dia 4: Caleta de Famara, quesería El Faro y Playa del Papagayo

Día 5: Vuelo de Regreso

Dia 4: Caleta de Famara, quesería El Faro y Playa del Papagayo

Después de los intensos días previos, decimos tomarnos nuestro último día completo en la isla de forma más relajada. Sólo teníamos dos objetivos, la caleta de Famara y la playa del Papagayo. Además las previsiones sobre el clima eran buenas, por lo que íbamos a poder disfrutar de estas playas.

Tras no madrugar y desayunar tranquilamente, emprendimos viaje hacía Famara, al norte de Lanzarote. Clasificaríamos este enclave como obligatorio, además se encuentra muy cerca de Teguise, por lo que no es mala opción visitar los dos enclaves en el mismo día. Se trata de una playa con un macizo montañoso detrás impresionante. Para rematarlo, en un día despejado (cosa poco habitual en Famara) puede verse la Isla Graciosa en el horizonte. Es un paraíso surfista por lo que hay cientos de ellos, pero la playa es suficientemente grande para poder disfrutar de un buen paseo por ella sin esquivarlos. El baño suele estar prohibido muchos días (bandera roja) como fue nuestro caso.

Tras encontrarnos con dos ejemplares de Carabela Portuguesa en la playa, consultamos Internet y pudimos ver que ya ha habido varias alertas por este tema en la zona (…¿calentamiento global?). Además, nos dolió mucho ver en la arena una gran multitud de trocitos pequeños de plástico…

Como hoy teníamos día tranquilo, decidimos volver a comer al apartamento, además cada uno de nuestros destinos hoy estaba en un punto distante de la isla y había que pasar cerca de Playa Honda. En nuestro camino de vuelta, muy cerca de Teguise, hicimos una parada en la Quesería El Faro (https://queseriaelfaro.es/), donde pudimos degustar varios quesos de cabra. Compramos los que más nos gustaron: semicurado, con Gofio y con pimentón. Es importante destacar que la calidad y sobretodo el precio de los quesos son fenomenales.

Tras comer, emprendimos camino hacia la playa, o mejor dicho, playas del Papagayo, porque son varias calas juntas. Para llegar hay que hacer los últimos 8km por carretera de tierra, con muchísimos baches, pero con cuidado y a 10 km/h se puede hacer fácil. Aunque la carretera sea mala todas las calas están muy bien indicadas. Nosotros decidimos pasar un rato en la playa del Papagayo, donde se encuentra un gran parking, y es muy sencillo bajar por unas escaleras incluso con el bebé (con porteo, eso sí). Antes de bajar se pueden ver fenomenales vistas de la cala, y hay que destacar que a diferencia de Famara, aquí las aguas son muy tranquilas y el baño es muy recomendable, aunque el agua está fría.

Playa del papagayo

Ya atardeciendo, volvemos al apartamento, ya que hay que hacer las maletas y cenar pronto, porque al día siguiente toca madrugar para coger el vuelo de vuelta.

Día 5: Vuelo de Regreso.

Tras devolver el coche de alquiler, nos plantamos en el aeropuerto son «sólo» hora y media de antelación, con la absoluta desesperación de Cagaprisas, que casi le cuesta la salud. Pero hay que destacar que es tiempo más que de sobra, ya que es el único vuelo que sale en un margen de 2 horas. Además avisan el embarque 10 minutos antes de embarcar, por lo que tuvimos tiempo para cambiar a Doña Pucheros un par de veces. Todos los baños del aeropuerto, que aunque es pequeño tiene varios, disponen de cambiador y están muy limpios. Por desgracia llego el fin de nuestro viaje y en cuatro días el comienzo de la cuarentena. Mucho ánimo a todos!!!!

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Lanzarote en 4 días (parte 3 de 4)


Día 1: Viaje en avión y llegada a Playa Honda

Día 2: Mercado de Teguise, Ruta escénica, Yaiza, Salinas y Playa de Janubio, Charco de los Clicos, Hervideros, El Golfo

Día 3: Timanfaya, Mirador del río, Cueva de los verdes, Jameos del Agua y Haría

Dia 4: Caleta de Famara, quesería El Faro y Playa del Papagayo

Día 5: Vuelo de Regreso

Día 3: Timanfaya, Mirador del río, Cueva de los verdes, Jameos del Agua y Haría

Empezamos el día con Cagaprisas saliendo un ratito a correr por Playa Honda, probando patinetes eléctricos y dándose un baño en la playa después de la carrera. Doña Pucheros y yo todavía renqueábamos un poquito más en la cama después de la paliza del día anterior. Una vez listos, montamos en nuestro coche hacia el Parque Nacional de Timanfaya, cuya última erupción volcánica data del año 1730 la cual duró seis años, dejando devastados muchos pueblos de la zona sur de la isla y convirtiéndose Parque Nacional en 1974.

En cuanto a las formas de visitar el parque, las hay de varias formas:

-En autobús, la denominada Ruta de los Volcanes, que es un recorrido de unos 30 minutos desde el Islote de Hilario, que fue la opción que nosotros elegimos.

A pie por tu cuenta, siguiendo la ruta de la Caldera Blanca, una ruta circular de 9Km.

A pie mediante visita guiada, la ruta de Tremesana, la cual hay que reservar con mucha antelación en esta web (estuvimos pendientes varios meses antes y nos fue imposible). Es gratuita y de unas 3h de duración.

Nuestro fallo principal fue dirigirnos primeramente al centro de visitantes, ya que en el mismo ofertan muy poca información en los puestos de entrada y, aunque dentro del centro hay un museo de interpretación del Parque, nos advirtieron que no admitían la entrada a bebés en una simulación de la erupción de un volcán. Para acceder al parque pasando del centro de visitantes hay que ponerle al navegador Islote de Hilario. Por el camino, encontraréis unas puertas donde hay unos empleados del parque que os cobrarán entrada (12€/persona) y por supuesto en efectivo, como no podía ser de otra forma… Una vez lleguéis al Islote hay que abandonar el coche en el parking y dirigirse a los autobuses que salen cada 15-20 minutos del islote. Es un camino en el cual hay paisajes lunares impresionantes, cráteres y coladas de lava. Tiene bastantes curvas pero es precioso y digno de ver.

Paisaje desde el autobús Parque Nacional de Timanfaya

A la vuelta de la ruta en bus, en el Islote de Hilario puedes observar demostraciones de géiseres, ver una barbacoa geotermal y también hay restaurante y tienda de souvenirs.

A continuación emprendimos camino hacía el Mirador del Río (una hora de trayecto, el más largo de todo el viaje), al llegar hay un gran parking (donde hicimos un pequeño picnic, y Doña Pucheros se puso hasta arriba de leche) y una construcción, para la que cobran entrada (4,5€). Realmente las vistas son iguales por lo que nos quedamos con las vistas desde la carretera. Las vistas son una maravilla, se puede ver la isla de La Graciosa, y «El Rio» no es otra cosa que el Océano Atlántico, entre Lanzarote y la citada isla.

Vistas de La Graciosa desde el mirador de El Rio

Nuestro siguiente «Waypoint» es La Cueva de los Verdes. En nuestra planificación del viaje tuvimos muchas dudas de verla, por si sería posible con el bebé. Al final, porteo mediante, nos envalentonamos y todo un acierto, la guía desde el primer minuto nos dijo que si el bebé lloraba que tranquilos que para eso llevaba altavoces. Además en los baños situados en el parking hay cambiador, que nos vino de fábula. La cueva es un tubo volcánico, donde se puede ver incluso la última fase del río de lava que circulaba por dentro, ya solidificada por supuesto. Debe su nombre a que allí se resguardaba una familia de ganaderos a los cuales apodaban «Los Verdes». El recorrido es de unos 45 minutos, y la guía explicó todo con mucho detalle. No es nada complicado para ir con un bebé, hay que agacharse unas cuantas veces, pero eso es lo más complicado… Dentro de la cueva hay una sorpresa que por supuesto no desvelaremos.

Continuamos nuestra excursión en los Jameos del Agua, que están a un minuto de la Cueva de los Verdes. Se trata de una construcción de César Manrique utilizando el mismo tubo volcánico que forma la Cueva de Los Verdes, el cual llega hasta el mar. Hay una zona inundada con agua de mar, donde viven unos cangrejos albinos endémicos diminutos. Es una gran cafetería-restaurante muy bonita y que en ocasiones hacen conciertos. Mientras veíamos a los cangrejos, Doña Pucheros decidió que era un buen momento para hacer sus necesidades, y descubrimos que aquí no había cambiador. Decidimos cambiarla en un banco ya que no había nada de gente, pues la hora ya era próxima a la de cierre. Un trabajador de limpieza se acercó a nosotros y pensamos que nos regañaría, pero nada más lejos… Nos ofreció ayuda.

Jameos del Agua

Acabamos nuestro palizón de día en el pueblo de Haría. Un rincón canario norteño típico que, aunque estaba un poco muerto porque acaban de ser los carnavales, nos sedujo por su sencillez y por lo castizo que es. Además tuvimos la suerte que nos pilló la super Luna. Es importante remarcar que en Haría hay un mercado de artesanía los sábados por la mañana que tiene buena pinta, pero que por desgracia no pudimos visitar.

Anochecer en Haría

Lanzarote en 4 días (Parte 2 de 4)

Día 1: Viaje en avión y llegada a Playa Honda

Día 2: Mercado de Teguise, Ruta escénica, Yaiza, Salinas y Playa de Janubio, Charco de los Clicos, Hervideros, El Golfo

Día 3: Timanfaya, Mirador del río, Cueva de los verdes, Jameos del Agua y Haría

Dia 4: Caleta de Famara, quesería El Faro y Playa del Papagayo

Día 5: Vuelo de Regreso

Día 2: Mercado de Teguise, Ruta escénica, Yaiza, Salinas y Playa de Janubio, Charco de los Clicos, Hervideros, El Golfo

Como afortunadamente íbamos a pasar un domingo entero en la fantástica isla de Lanzarote, no pudimos dejar de visitar el mágico Mercado de Teguise, sólo disponible los domingos por la mañana de 9 a 14h. Al llegar al pueblo hay bastantes parking al aire libre habilitados para turistas por menos de 2€ todo el día, y os recomendamos no quedaros en el primer parking puesto que los hay más cercanos al mercado (sobre todo si vais en temporada baja como nosotros).

Calles del mercado de Teguise (Leia está diciendo Hola! con la mano)

El mercado es una auténtica pasada, sobre todo para los amantes de los mercados como nosotros :), hay fruta de la tierra, comida, puestos con souvenirs, artesanía por un tubo, jabones con aloe de Lanzarote… Todo ello entremezclado en un pueblo encalado típico canario precioso de ver de por sí. A media mañana paramos a comprar un crepe y después fuimos a tomar un café (por total casualidad) en la que para nosotros es la cafetería más baby-friendly del mundo: La Taza Café. En ella, el personal es amabilísimo, hay una zona de juegos con juguetes de madera para los niños, tronas disponibles, sofás para amamantar, cambiador con pañales y toallitas, adaptador de wc para los niños… Maravilloso!! así da gusto tomar algo…

Después de descansar, seguimos dando otra vuelta por el mercado. ¿Que qué compramos? Pues un jabón de aloe de Lanzarote, una camisa hawaiana para Cagaprisas, un colgante de macramé para Doctora Gaseosa y un pichi para Doña Pucheros. Además compramos plátanos, pitayas, papayas… 🙂

Después de ver de arriba a abajo el mercado, tomamos rumbo al pueblo de Yaiza, otro pueblo canario típico digno de ver. Merece la pena dar una vuelta por la Plaza de Nuestra Señora de los Remedios y ver su iglesia. En este punto, descansamos otro poquito para tomar un picnic, tanto Leia como nosotros.

Leia de picnic en la Plaza Mayor de Yaiza

Después de Yaiza, cogimos la carretera panorámica LZ702, atravesando localidades como Casitas de Femés, Femés y al mirador el Balcón de Femés, donde hay un restaurante con unas vistas estupendas que aunque cuando fuimos nosotros se encontraba cerrado, el mirador está justo al lado del restaurante y es de acceso libre.

Vistas Mirador el Balcón de Femés

Por esta misma carretera, llegamos a las Salinas de Janubio y a la Playa de Janubio, donde Cagaprisas cogió nuestro carrito todo-terreno y lo puso en modo off-road hasta acercarnos a la orilla de la solitaria playa, donde hay unas vistas muy bonitas. Además, estuvimos apunto de tener un disgustillo, porque se nos cayeron las llaves del coche de alquiler en medio de la arena y nos las encontramos a nuestra vuelta… qué despiste!!!

Droides en la Playa de Janubio (Foto star wars extraida de: https://www.cineworld.co.uk/)

Después proseguimos a Los Hervideros, donde hay un parking bastante grande para coches al aire libre. El camino hacia los propios Hervideros está bien señalizado y hay varios sitios para explorar. Como Doctora Gaseosa hice honor a mi nombre una vez más por unos minutos, ya que estaba algo difícil para llegar con el carrito a todas partes y Leia estaba durmiendo. Más tarde, continuamos ruta hacia El Charco de Los Clicos, cuya carretera de acceso se encuentra cortada y no se puede llegar al mismo Charco, por lo que hay que continuar hacia El Golfo y acercarse al mirador de la Playa del Golfo, y desde allí se ve tanto la Playa como el Charco.

Por último, por recomendación de Mónica (una lanzaroteña de adopción por unos meses) acabamos nuestro recorrido en el restaurante Casa Torano, en El Golfo, comiéndonos unas lapas, unas papas arrugás y una cazuela de gambas y pulpo viendo el espectacular atardecer.

Ideas para hacer con un bebé durante la cuarentena en casa

Antes de empezar a publicar nuestros post de viajes, nos ha parecido útil compartir con las familias cómo estamos afrontando la cuarentena en casa con un bebé: ideas sobre qué hacer con ellos, cómo pasar estos días en casa y, finalmente, por la parte que me toca (Doctora Gaseosa) no puedo terminar este post sin unos consejillos para estos días a nivel médico.

Pero primero, ¿qué podemos hacer con un bebé en casa para que no se aburra ni él ni nosotros?, aquí van algunas ideas:

  1. Saca todo el arsenal de juguetes habidos y por haber en casa adecuados a su edad. Es hora de estrenar aquellos que aún no habéis probado o darle mucha más caña a sus favoritos. Utilízalos para jugar con tu hijo y cámbialos con frecuencia para que no se aburra.
Caja de juguetes de Leia

2. Déjalo que realice ejercicio físico acorde a su edad (os dejo referencia de la Asociación Española de Pediatría en este link). En el caso de los bebés más pequeños se trata de dejarlos que muevan las cuatro extremidades libremente mientras están tumbados, girar la cabeza a ambos lados ante un estímulo visual y/o auditivo (puedes utilizar un sonajero, por ejemplo), coger juguetes en la línea media (a partir de 2-3 meses), ponerse de pie…. Aquí os dejo este vídeo de Youtube de estimulación temprana en bebés de 0-3 meses que me ha parecido que está bastante bien, que recoge todos estos ejercicios.

3. Juega a que descubra nuevas texturas. Como nos enseñaron las profes de Alopeke, juega a presentarle nuevas texturas a tu hijo, es una forma de estimularlos. Puedes ayudarte de una pluma, una gasita grande, un martillo de juguete de goma, una pelota de goma de pinchitos… Te sorprenderá!

4. Cámbialo de sitio con frecuencia mientras no esté en tus brazos o jugando contigo, ellos también se aburren. Sin quitarles ojo de encima, cámbialos del gimnasio a la trona, hamaca, sofá… lo que tengas!

5. Ponles música. Nunca nos dejan de sorprender las reacciones que tiene Leia ante distintos tipos de música. En Youtube puedes encontrar varias pistas de música para bebés para momentos de relajación, ponerla de fondo mientras juegas con él, etc.

6. Crea nuevos juguetes para tu bebé, por ejemplo, nuevos móviles. Hay muchos ejemplos por Internet, nosotros utilizamos el libro 60 actividades Montessori para tu bebé: Ideas para ayudarlo a ser autónomo y preparar su universo de Marie Helene Place. Y la abu Isa ha hecho virguerías como esta:

Móvil Montessori realizado por abu Isa

7. Utiliza las suscripciones gratis que algunas plataformas de TV han lanzado. Aunque la Asociación Americana de Pediatría desaconseja totalmente el uso de pantallas en menores de 2 años, puedes dejar las canciones de fondo sin que tu bebé mire a la pantalla. Por ejemplo, el canal BabyTV que está disponible en Movistar y en Sky.

8. Si sales fuera de casa, que no deberías más que por extrema necesidad (como mucho, para comprar medicamentos o alimentos si escasean en tu nevera), lava las manos a tu hijo (y a ti mismo) al volver a casa con su jabón habitual para bebés.

9. Limpia los juguetes de tu hijo con agua y su jabón habitual o con productos especiales desinfectantes para niños.

Ejemplo desinfectante de juguetes para niños

10. Con el fin de no tener problemas con los productos de higiene infantil, te recomendamos encarecidamente el uso de pañales de tela (pincha aquí y te lo explicamos mejor en esta entrada) y/o toallitas lavables. Así de paso le echas un cable al medio ambiente. En el caso de los pañales hay especiales para recién nacido y para niños mayores hasta el final del pañaleo. No olvides lavarlos por encima de 60º, con jabón especial para bebés y sin suavizante. Puedes encontrarlos en Amazon o en tiendas más especializadas. Próximamente haremos post con nuestra experiencia al respecto ;).

11. Planifica nuevos viajes. Recopila información sobre próximos destinos, mira vuelos, alojamientos, etc. y planifica tus próximas vacaciones para animarte e ilusionarte.

Para terminar, estas tres últimas cosillas: os dejo este link de otro blog con un cuento sobre el Coronavirus muy chulo para contar a vuestros hijos más mayores cuando os hagan preguntas. Otro link de la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria con información sobre el coronavirus para padres. Y, por último, estos consejos a nivel general del servicio vasco de salud (Osakidetza).

Proponed vuestras ideas en los comentarios 🙂

Lanzarote en 4 días (Parte 1 de 4)

Día 1: Viaje en avión y llegada a Playa Honda

Día 2: Mercado de Teguise, Ruta escénica, Yaiza, Salinas y Playa de Janubio, Charco de los Clicos, Hervideros, El Golfo

Día 3: Timanfaya, Mirador del río, Cueva de los verdes, Jameos del Agua y Haría

Dia 4: Caleta de Famara, quesería El Faro y Playa del Papagayo

Día 5: Vuelo de Regreso

Día 1: Viaje en avión y llegada a Playa Honda

Desde Cuenca, cogimos nuestro coche para dirigirnos al aeropuerto de Madrid-Barajas con la amenaza del Coronavirus revoloteando (de momento sólo había casos en Italia). Allí, como casi siempre, dejamos nuestro coche en el parking P1 de la Terminal T1, situado en la propia terminal, recomendable si se va a hacer un viaje de pocos días (no más de 5-7 días) y que ofrece grandes descuentos si se realiza la reserva desde la web de Aena. En el caso de la Terminal 1, se trata de un parking al aire libre en frente de la terminal, el resto de terminales son cerrados.

Como no podía ser de otra manera y gracias a nuestro piloto Cagaprisas una vez más hizo honor a su nombre y nos plantamos en la terminal 4h antes de la salida del vuelo, con lo que pudimos hacerlo todo con bastante tranquilidad…

Respecto al control de seguridad con bebés, una vez intentas entrar al mismo un empleado te dirige al puesto especial para familias y personas con sillas de ruedas, por lo que te evitas bastante gente y colas, y además está decorado con dibujos para los niños. Aunque nosotros no llevábamos leche en polvo, ni agua, ni potitos ni otros alimentos infantiles, éstos pasan por un control aparte y sí se pueden llevar en el avión, te lo dicen los propios empleados del control.

Una vez pasado el control, nos dirigimos a cambiarle el pañal a Leia. Prácticamente en todos los baños del aeropuerto (sino en todos) hay cambiador para bebés en un baño aparte, con lo que también se ahorran bastantes colas. Más tarde, nos enteramos que hay disponible una sala de lactancia y juegos en la terminal, con lo que fuimos a verla para darle de comer a Leia.

Dentro de ella hay un empleado que te toma los datos y la tarjeta de embarque, y dentro de ella hay sala de lactancia, sala con cambiador, sala de cunas y sala de juegos. Es un espacio bastante tranquilo para descansar y darle de comer a tu bebé si lo necesitas, muy recomendable.

Una vez anunciaron la puerta de embarque, nos dirigimos a ella y comenzamos a plegar nuestro carrito y meterlo en las bolsas de transporte y, una vez hecho, nos colocaron las cintas identificativas. El carro lo recogieron nada más entrar al avión.

Dentro del avión, los azafatos nos dieron un cinturón para el bebé que va anexo a tu propio cinturón. Una vez despegado el avión y habiendo jugado un buen rato, estrenamos la cuna hinchable que nos regalaron los resis de Cuenca, y Leia se echó una buena cabezada.

Cagaprisas y Doña Pucheros jugando en el avión

Una vez en el aeropuerto de Lanzarote, no nos devolvieron el carro nada más salir del avión, lo cual fue un poco fastidio, por lo que fuimos a la cinta correspondiente a por él. Nuestra sorpresa (y en parte momento de nervios) fue que salió por la cinta de equipaje especial, no olvidéis chequearla por si las moscas, nunca se sabe, a nosotros nos costó un ratito darnos cuenta y ya andábamos con la mosca detrás de la oreja…

Cuando ya teníamos el carrito en nuestro poder, fuimos a por nuestro coche de alquiler en la empresa Top Car, la cual nos dejaba gratis tanto la silla grupo 0 del bebé como añadir un segundo conductor. La empresa en cuanto al trato de recogida y entrega del coche es recomendable 100%, no tuvimos ni un problema. La silla grupo 0 que entregan es una Maxi-Cosi de las de toda la vida de las más baratas de Hipermercado (o al menos a nuestro entender…).

Leia en su grupo 0 de Top Car

Una vez todos en el coche, pusimos rumbo a Playa Honda, a pocos minutos del aeropuerto de Lanzarote, para ir a nuestro apartamento Ámbar, el cual recomendamos 200%. Tiene dos habitaciones y todo lo que necesitas para estar bien, así como todos los utensilios de cocina necesarios. Al llegar, nos faltaba la cuna para el bebé y el dueño nos la trajo en apenas 15 minutos, muy amable y servicial.

Finalizamos nuestro día en el Centro Comercial Deiland visitando un Hiper Dino, hipermercado canario, para hacer compra de los próximos días en la isla.

Drama!! En este bar no hay cambiador para bebés…

Uno de nuestros miedos cuando salíamos fuera de casa a tomar algo, sobre todo cuando Leia tenía unas pocas semanas, era que el bar donde quedásemos no tuviera cambiador para bebés. Aunque intentáramos quedar en un sitio que sí lo tuviera, a veces y sobre todo en los viajes, nos encontrábamos que éstos escaseaban. Tocaba agudizar el ingenio, por lo que aquí os proponemos algunas opciones para cambiar a tu bebé cuando no dispones de cambiador en el local donde te encuentres:

En el cuco-capazo: para ello, conviene que quites el saco cubrepiernas para no mancharlo todo. Si dispones de cambiador de viaje, ponlo en el lugar del saco y tumba ahí a tu bebé. Elige, a ser posible, un lugar en el que no haya mucha gente para evitar miradas asesinas y que esté calentito. El pañal puedes tirarlo o bien en las papeleras de los baños o lleva una bolsa de plástico contigo en el que lo puedas guardar y tirar cuando llegues a casa.

En el coche: puedes utilizar el asiento de atrás del coche o el maletero para posar tu cambiador de viaje y cambiar al bebé.

En una mesa: pidiendo permiso a los camareros del bar, casi siempre improvisan un lugar donde poner el cambiador, cuando no se dispone de cambiador en el local.

¿Y vosotros, dónde cambiáis a vuestros hijos cuando no hay cambiador? Ayúdanos con tus comentarios!

Locales con cambiador para bebés

Desde que Leia nació a veces el cambiar el pañal fuera de casa puede convertirse en un quebradero de cabeza. Afortunadamente cada vez más existen locales que disponen de cambiadores de pared que hacen la vida más fácil a los papás. Con esta entrada, pretendemos hacer una recopilación de locales con cambiador para que sirva de ayuda a otras familias, con la intención de ir actualizándolo a medida que vayamos descubriendo nuevos locales o nos aportéis otros en los comentarios.

Locales en Albacete capital:

Cafetería Romero Comercio Justo

VIPS Albacete (CC Imaginalia y C/Tejares)

Foster’s Hollywood Albacete

Cafetería Valor

Cafetería La Sacristía

CC Albacenter (dispone de sala de lactancia)

Café Central (mesa que sirve como cambiador)

Locales en Cuenca capital:

Bar Café y salón de té

Bar La barrica de Miguel (Barrio Fuente del Oro)

CC El mirador (dispone de sala de lactancia)

Foster’s Hollywood Cuenca

Restaurante Recreo Peral

Restaurante La Playa

Locales en Guadalajara capital:

Menta y Canela

Bertíz Panadería

Locales en Madrid:

Alopeke

CC Tres Cantos (dispone de sala de lactancia)

Ikea Vallecas (dispone de sala de lactancia)

Ikea Alcorcón (dispone de sala de lactancia)

Vips Alcorcón

Locales en Lanzarote:

Cueva de los verdes

La taza café (Teguise)

¿Conocéis alguno más? Ponlo en los comentarios y lo actualizaremos! Si tienes un bar y quieres aparecer en la lista, contacta con nosotros.

Objetos imprescindibles en el carrito del bebé

A continuación os presentamos algunos imprescindibles tanto de viaje como no, para llevar en el carrito de bebés.

Si lleváis una bolsa sin compartimentos, resulta de gran ayuda utilizar unas bolsas organizadoras de equipaje, para tardar menos tiempo en encontrar las cosas.

Si por el contrario, lleváis una mochila tipo Mummy Bag (o Parents’ Bag como nosotros decimos) va diseñada para llevar cada cosa en su sitio. Nosotros disponemos de las dos y utilizamos siempre la misma regla: si sólo vamos a ir con porteo llevamos la Parents’ Bag, si llevamos carrito llevamos la bolsa normal.

  1. Cambiador de viaje: es el imprescindible número 1, tanto para ir de viaje como para salir fuera de casa. La mayoría son impermeables y lavables, ya que nunca sabes dónde vas a tener que posarlo. También suelen llevar compartimentos interiores para guardar pañales, crema, etc.

  1. Pañales: si vas a salir fuera de casa, ten en cuenta que de media los bebés más pequeños utilizan entre 8-10 pañales al día. Puedes ponerlos dentro del cambiador de viaje o sueltos. Nosotros cuando estamos fuera de casa utilizamos pañales desechables biodegradables y en casa utilizamos de tela.
  1. Toallitas desechables: aunque no somos muy amigos de las toallitas, hay veces que cuando se está fuera de casa hay que echar mano de ellas cuando falta palangana y jabón. De la misma forma, se pueden incluir dentro del cambiador de viaje o sueltas.  También hay opciones biodegradables o lavables.
  1. Crema del pañal: al igual que lo anterior, hay veces que la dermatitis asoma y hay que echar mano de ella. Suelen ser de gran ayuda los sobrecitos de muestra que suelen dar en las canastillas de embarazo o nacimiento, ocupan menos y pesan menos.
  1. Muselina o gasita: como dice Cagaprisas son como los paños de cocina pero de bebés. Sirven para todo, para limpiar la babita o las bocanadas, los moquillos o para posar cosas del bebé encima cuando estás fuera. En nuestro caso, las utilizamos también para envolver las conchas protectoras de pezón mientras estábamos fuera de casa.
  1. Capa de lluvia del carrito: merece la pena llevarla siempre encima por lo que pueda pasar…
  1. Una muda de recambio: en el momento y lugar menos pensado el bebé puede manchar la ropa, por lo que recomendamos llevar al menos 1-2 mudas de recambio, dependiendo del tiempo que se vaya a estar fuera de casa
  1. Dos bodies de recambio: por la misma razón que lo anterior, conviene hacer acopio de al menos dos bodies por lo que pueda pasar.
  1. Ropa interior de recambio: dado que puede que le cambiemos la ropa fuera de casa, es conveniente llevar unos calcetines o leotardos de recambio por si hay que cambiarle.
  1. Arrullo o manta pequeña: útil en cualquier situación si hace frío, tanto para porteo como sin él.

11. Fular de porteo o mochila portabebés ultraplegable : si estáis acostumbrados al porteo, es de utilidad llevar a mano un fular o una mochila portabebés de viaje que ocupe poco para cuando el bebé esté cansado de ir en el carro.

12. Tarjeta sanitaria del bebé e informes médicos

13. Termómetro para bebés: suelen ser de punta flexible y de detección rápida

14. Antitérmicos: lleva algún antitérmico como el paracetamol a mano por si hiciera falta.

15. Si estás dando lactancia materna, es imprescindible llevar una botella de agua

¡¡¡¡¡¡¡Si echas algo en falta, añádelo en los comentarios!!!!!!!

¿Quiénes somos?

Somos una pareja manchega viajera que recientemente ha dado la bienvenida a nuevo miembro de la familia. Con el fin de luchar contra los tópicos populares tales como “Cuando llegue el bebé os vais a tener que tranquilizar…”, “Ya veremos si viajáis tanto…” o “Le vais a meter el palizón a la chiquilla…” nace este blog, con el objetivo de animar a padres y familias a continuar con su vida viajera sin miedos ni prejuicios.

Para comenzar, una breve introducción de la familia al completo:

Leia, más conocida como Doña Pucheros, que nació en noviembre de 2019: “Sólo necesito mi teta y juegos con mi papá para ser feliz. Me porto bien en todos los sitios menos en mi casa, y el día que no salgo fuera de casa la lío. Soy el complemento perfecto para viajar con mis papás”.

José Carlos, El Cagaprisas: “Soy profesor de Secundaria en la asignatura preferida de los niños, las Matemáticas. Amante de la naturaleza, pajarólogo y fotógrafo principiante,  estudiante de Ciencias Ambientales por diversión y me encanta escuchar música cañera. Me gusta estar en los aeropuertos y estaciones con bastante previsión (desesperando a mi mujer), si por mi fuera iría el día de antes…” Destino soñado: Patagonia Argentina y Chilena.

Ana, Doctora Gaseosa: “Médico de familia, terrorista radical de la evidencia científica y de la lactancia materna, neo-friki y loca de los gatos. Me gusta planificar casi detalle a detalle todos los viajes (desperando a mi marido). “De mecha corta”, como dice mi amigo Cheivid, me enfado con bastante facilidad y se me pasa con la misma facilidad; de ahí a que mi amiga Alicia me haya apodado así”. Destino soñado: Manitoba, Bahía de Hudson (Canadá).

¿Por qué hacemos este blog?

El objetivo de este blog es compartir nuestros experiencias viajeras, comentando directamente viajes o comentando como nos ha ido con algún objeto. Es importante remarcar que nadie nos regala ni paga nada, son los objetos que hemos decidido comprar nosotros, y comentamos como nos ha ido a nosotros con ellos. También realizaremos alguna publicación sobre locales baby friendly, que nos vamos encontrando a nuestro día a día.